Ya se que no estoy diciendo ninguna novedad. Sin embargo vivimos en un mundo que hace como si las mujeres no menstruáramos. Un mundo que le gusta mirar para otro lado porque menstruar nos han dicho que es asqueroso, maloliente, sucio.
Y ¿porqué estoy diciendo esto?
Porque quiero que rápido puedas percibir de qué va esto. Porque quiero que rápido puedas darte cuenta de donde estás y qué tipo de recursos voy a compartir contigo.
Y porque tener en cuenta de que somos menstruantes ha sido fundamental en el camino de conocerme y acompañar luego a otras mujeres.
Las mujeres menstruamos y aunque esto para ti no sea una novedad te cuento qué es la menstruación, y voy a procurar hacerlo lo más ameno posible.
Menstruamos porque ovulamos, no al revés. Por lo que menstruar es parte de lo que llamamos el ciclo menstrual/ovulatorio. Y el ciclo menstrual de la mujer está ligado al proceso biológico de crear vida.
Las mujeres cuando nacemos albergamos en nuestros cuerpos todos los óvulos que utilizaremos a lo largo de nuestros ciclos ovulatorios/menstruales. Estos huevos habitan en nuestros ovarios desde nuestro nacimiento. Cerca de 450.000 en sus respectivos sacos, llamados folículos. A medida que vamos creciendo, llegando a la pubertad, nuestros cuerpos comienzan a producir hormonas que hacen que esos óvulos maduren. Por lo que entre los 9 y 14 años nuestro ciclo ovulatorio dará lugar a el primer sangrado, llamado menarquia y este será el comienzo de una etapa vital que se repetirá a lo largo de nuestra vida fértil hasta llegada la menopausia, cuando progresivamente dejamos de ovular, y por lo tanto de menstruar. Con ella entramos en una nueva etapa de la vida, entre los 47 y los 60 años. Durante la etapa fértil los sangrados periódicos se interrumpen sólo cuando la mujer está embarazada, está lactando, en caso de alguna enfermedad, o de algunos desequilibrios, como estrés excesivo, pérdida repentina de peso, algunos casos de diabetes u otros factores físicos psicológicos y emocionales. El ciclo está influenciado por todo lo que nos rodea. Lo que comemos, nuestro patrón de sueño, si hacemos o no ejercicio, la exposición a la luz, nuestros hábitos cotidianos, por lo tanto cualquier influencia en lo físico, emocional, mental o energético. Los cambios que experimentamos físicamente a lo largo del ciclo están influenciados principalmente por cuatro hormonas, que en su danza a través del cuerpo median de manera integral. Y he dicho principalmente porque la verdad intervienen más hormonas.Para tener una referencia visible y concreta decimos que el primer día de sangrado es el día uno del ciclo, ya que es algo que podemos ver claramente. Así que cada ciclo comenzaremos a contarlo desde que sangramos. Hay mujeres que tienen un ligero manchado previo a la menstruación, por lo que es importante diferenciar sangre de fluido marrón.